martes, 15 de mayo de 2018

Jornada 15: Embalse de Cijara 05-05-2018

Lugar: Cijara

Fecha: 05 de Mayo del 2018

Miembros: Alejandro, Alex, Eugenio, Juanmi y Pepe

Descripción:


Pues aquí volvemos nuevamente a la carga con una nueva jornada de pesca cargada de anécdotas. Los que íbamos a intentar localizar a nuestros amigos escamados seríamos Alejandro, Eugenio, Juanmi, Pepe y un servidor.

Según indicaban las predicciones meteorológicas, el día iba a ser espectacular: poco viento, completamente soleado y con una temperatura agradable.

Cafelito de rigor y llegada al embalse de Cijara justo cuando estaba amaneciendo, para pillar a los peces recién sonada la alarma, jeje. Montamos los aparejos y nos dispusimos a tentarlos sin más dilación. No había nadie en la zona, lo que nos hacía preguntarnos si los peces estarían igual de activos que en el García De Sola, tal como vimos en jornadas anteriores. Pronto lo descubriríamos.



Empezamos a patear orilla con las fuerzas cargadas al 100% y cada uno probando un tipo de señuelo diferente para intentar localizar a los micropterus allá dónde quisieran encontrarse.



No comenzaba de la mejor manera posible el día, ya que a pesar de que el agua estaba como una balsa de aceite, no se observaban ejemplares orillados y nuestros lances no obtenían la tan ansiada recompensa.



Seguíamos andando y lanzando en lugares idóneos para nuestros peces, sin éxito, hasta que Uge, después de mucha insistencia por parte de todos, logró abrir la lata y sacar un bonito black bass que rondaría el kilogramo de peso.



Nada más lejos de la realidad, puesto que los peces seguían bastante más apáticos que en jornadas anteriores. Pero según avanzaba la mañana, hubo un momento de actividad plena, en la que Alejandro, fue el único capaz de aprovecharlo, llevándose a su marcador tres bonitos ejemplares de estos queridos diablillos. En este día, no eran tan grandes como los del Sola (oscilaban entre los 700 g y 1.50 kg) , pero como todos ya sabemos, esto no quita para divertirnos con sus peleas.




Hoy era Alejandro el que parecía tener el día favorable, ya que un pequeño rato después de estas tres capturas, un luciete de algo más de medio kilo atacó su señuelo, dándole la posibilidad de hacerse la querida foto con él.



Mientras tanto, Juanmi, Pepe y yo, seguíamos sin tocar escama, pero no desistimos, y seguimos intentándolo, ya que sabíamos que los peces estaban ahí.

Una vez entrada la mañana, a eso de las 12:00, ya se podían observar ejemplares (algunos bastante buenos) por las orillas. Aquí, Uge si que pudo aumentar su contador gracias a una serie de capturas bastante buenas, lo cual nos demostraba al resto que algo debíamos estar haciendo mal.



En un momento de la mañana, Alejandro, Eugenio y Juanmi siguieron orilla adelante, mientras que Pepe y yo, con la moral un poco baja, nos quedamos rezagados. En este momento, fue Juanmi el que se quitó el bolo con dos buenas capturas mientras que Uge consiguió llegar hasta las siete unidades capturadas, por lo que parecía que iba a ser el que se coronase como "ganador" de la jornada.



Pepe y yo, mientras tanto seguíamos con el bolo sobre nuestras cabezas. En uno de los lances hacia los peces orillados, Pepe consiguió clavar a un ejemplar bastante bueno, pero que por desgracia, se desclavó justo cuando estaba apunto de echarle mano. Mala suerte ya que sería la única oportunidad que tendría...

Decidimos ir andando hacia el coche tocando las zonas que veíamos más probables para su pesca. Yo, ya cansado de tentar a los basses, decidí cambiar de señuelo, montar un bajo, y tentar a los lucios, a ver si había suerte con ellos, pero tampoco estaba teniendo suerte, hasta que al final, ya casi pegado al coche, noté resistencia al otro lado de mi línea. No era mucha tensión ni parecía pelear mucho, pero sabía que se trataba de un pez, hasta que conforme se estaba acercando a la orilla, pude osbservar que se trataba de una preciosa lucioperca, con una librea azulada muy bonita. Finalmente, la capturé y conseguí quitarme el bolo con ella. Su peso rondaba el kilo de peso.



Pero esto no fue todo. Acto seguido logré clavar dos lucietes de aproximadamente 1 kg casi seguidos, lo cual hizo que terminara la jornada mejor de lo que se me estaba presentando.




Esto fue la gota que colmó el vaso, y ya decidimos poner punto y final a un día en el que la actividad de los peces no fue la esperada y fue más por rachas que por constancia, pero que no nos quitó la diversión que veníamos buscando.

Sin más, esperamos que las jornadas venideras sean más fructíferas.

Alex

Vídeo de la jornada:


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