lunes, 31 de diciembre de 2018

Jornada 27: Embalse de Bolarque 27-12-2018

Lugar: Bolarque

Fecha: 27 de Diciembre del 2018

Miembros: Alejandro, Alex, Borja y Juanmi

Descripción:


Acercándonos al fin de año, decidimos hacer una salida, quién sabe si la última de esta temporada, con las bajas temperaturas como principal miedo. Esta vez el lugar elegido fue el embalse de Bolarque, que normalmente nos suele regalar alguna que otra captura.

Así, en esta ocasión disfrutaríamos de la jornada Alejandro, Alex, y yo en la barca, y el valiente de Borja sería el encargado de conocer el embalse desde orilla.




Antes de empezar, invertimos un poco de tiempo en intentar localizar una zona que permitiese meter la barca en el agua, por lo que no fue hasta cerca de las 10 de la mañana cuando realizamos los primeros lances. La mañana se presentaba fría, muy fría, y con una niebla bastante densa, provocando el típico dolor insoportable de manos tan común en los pescadores.




Así, las condiciones parecían idoneas para la pesca del lucio, pero lo cierto es que pasaron un par de horas sin noticias sobre pez alguno. Poco después, cuando mi señuelo se encontraba próximo a la embarcación, y con Alex como testigo privilegiado, noté actividad al otro lado de la línea. A pesar de estar cerca de la barca, el lucio se encontraba a unos 6 o 7 metros, por lo que durante este espacio, me permitió disfrutar de una bonita pelea. Y bonita fue también la sensación de ver a un ejemplar así salir a flote y acercarlo a la barca. Unos 3.7 kg de peso y una grata satisfacción ya que los lucios se me habían estado resistiendo bastante durante todo el año.



Parece que esta captura subió la moral a los miembros de la embarcación e incluso a Borja, que se enteró de la captura via Whatsapp. Así, Alejandro seguía concienzudamente intentando dar con el señuelo adecuado mientras que Alex no estaba teniendo un buen día con un dolor de espalda que prácticamente le impedía realizar lances.



Yo mientras tanto seguía a lo mío. Y acompañado de la salida del sol vino una segunda picada en una zona de árboles sumergidos. En este caso la picada fue extraña ya que en vez de sentir una mayor resistencia, lo que noté fue como si no llevase nada de peso, ni de señuelo, lo que probablemente reflejaba que la dirección de ataque del lucio había sido la misma en la que yo me encontraba recogiendo el sedal. En este caso el lucio rondaba los 1.8 kg y sirvió para culminar un día que por mi parte había sido bastante bueno.




Seguimos intentándolo durante un par de horas más, a ver si algún miembro más conseguía quitarse el bolo pero desafortunadamente ni Alex ni Alejandro ni Borja tuvieron picada alguna. Antes de que empezase a anochecer, decidimos dar por finalizada la jornada recogiendo los aparejos y poniendo rumbo a casa comentando todas nuestras impresiones sobre este nuevo día de pesca.

Sin más, me despido hasta la próxima deseándonos felices fiestas y feliz año nuevo en nombre de LucioBass.

Juanmi

viernes, 14 de diciembre de 2018

Jornada 26: Embalse de Bolarque 12-12-2018

Lugar: Bolarque

Fecha: 12 de Diciembre del 2018

Miembros: Alejandro, Alex y Pepe

Descripción:


Bueno chavales, un día más decidimos mojar nuestros señuelos. En esta ocasión, nos decidimos Alejandro, Alex y yo, ya que los demás no podían.

El día parecía prometedor: sin mucho frío, poco viento y con mucha niebla aunque bueno, lo del frío fue solo al principio porque luego empezaron a bajar bastante las temperaturas, pero para la época que estamos no estuvo nada mal.



En principio los peces no parecían que estuvieran por la labor, estaban apáticos totalmente, pero sobre las 11:30 aproximadamente nos sorprendió un bonito pez que al final fue el único que pudimos ver aunque no paramos de intentar conseguir algún otro, pero no dimos con la tecla.




Nosotros seguimos probando y probando pero el día iba pasando y no había manera, no hubo respuesta por parte de los peces.

Finalmente decidimos dar el día por finiquitado y volvernos para tomar unas cervezas y a casita, otro día será mejor.



En fin, sin mucho más que contar y estando ya un poco cansado (los Ramírez ya saben por qué, jajaja) me despido hasta la próxima salida.

Un abrazo y buena pesca

Pepe

martes, 11 de diciembre de 2018

Jornada 25: Embalse de Orellana 08-12-2018

Lugar: Orellana

Fecha: 08 de Diciembre del 2018

Miembros: Alejandro, Alex, Borja, Juanmi y Pepe

Descripción:


Aquí estamos de nuevo después de una buena temporada sin mojar los señuelos. Ya teníamos oxidados los carretes, pero siempre hay un retorno para nuestro deporte favorito.

Los valientes de la semana seríamos Alejandro, Borja, Juanmi, Pepe y yo mismo y nos decantamos nada más y nada menos que por nuestro querido embalse de Orellana. Esta vez iríamos a una zona que hacía mucho tiempo que no visitábamos, ya veríamos qué tal se nos daría.

Madrugón y carretera para enfilar nuestro destino desde las 4 de la mañana. Después de nuestras correspondientes paraditas para tomar algún que otro cafelito y copita, llegamos a nuestro sitio en torno a las 8:30 de la mañana.

El día resultaba esperanzador en cuanto a climatología se refería, ya que no soplaba nada el viento y no hacía frío para la época en la que estabámos.




Borja y Juanmi comenzaron la andadura mientras nosotros lo haríamos pasados unos minutos, cuando finalizamos de montar la barca.

Ya llevaban recorridos bastantes metros cuando nosotros comenzamos, pero no tardó ni dos lances en hacer acto de presencia el primer pez. Noté resistencia al otro lado del sedal y pudimos visualizar como un luciete pequeño venía clavado de mi señuelo, pero al acercarse a la barca y con una buena cabezada, logró zafarse de él.

Parecía que la jornada pintaba bien, pero nada más lejos de la realidad, ya que esa fue la única noticia que tuvimos de los peces durante toda la mañana hasta que nos comimos el bocadillo. Ni una picada, ni desde la barca ni nuestros compis de orilla.



Fue entrando en una recula cuando de nuevo un lucio atacó mi señuelo. Esta vez si, conseguí quitarme el bolo, aunque no muy satisfecho por las dimensiones de nuestro amigo.


 
Con esto, ya decidimos darnos la vuelta y dirigirnos al coche para ir recogiendo, pero en el trayecto de vuelta, Pepe hizo lo propio con otro lapicerín semejante al mio, rondando los 500 g.



Después de esto, si que no volvimos a tener noticias de los lucios, aunque al menos pudimos ver algunos ya que según nuestras informaciones, estaban duros, y así pudimos comprobarlo.

Pepe y yo conseguimos salvar el bolo, pero el resto de los compis no pudo conseguirlo, aunque ya se sabe que la pesca no da más que sorpresas y cualquier otro día puede sonar la flauta.

Una vez todo estaba recogido, nos pusimos rumbo a Madrid, donde nos esperaban las cervecitas frescas y donde pudimos juntarnos con Alfonso para contarle todas las anécdotas del día.



Un abrazo.

Alex