domingo, 30 de septiembre de 2012

Jornada 31: Embalse de Finisterre 29-09-2012

Lugar: Finisterre

Fecha: 29 de Septiembre del 2012

Miembros: Alex, Alfonso, Juanmi y Pepe

Descripción:

En esta ocasión necesitábamos un destino cercano debido a que varios de los compañeros teníamos cosas que hacer por la tarde y no podíamos demorar la vuelta a casa. Por tanto, decidimos ir a visitar el embalse de Finisterre.


Solamente Pepe y Alex lo conocían, por lo que para Juanmi, Uge y para mí era un pantano inexplorado, por lo que necesitamos buscar algo de información acerca de dicho registro antes de aventurarnos a ir.


Toda la información recogida no era para nada esperanzadora: siendo un pantano que hace años daba muchos y muy buenos peces, en éstos últimos la situación era totalmente contraria: peces muy, muy duros y de talla más bien pequeña. Aún con esto, nos decidimos a ir y probar fortuna.

Cuando llegamos, a eso de las 8 de la mañana más o menos, ya se veía relativamente y nos pusimos manos a la obra. En seguida Alex tuvo una picada pero sin poderla materializar. Esto, junto con el escenario que nos encontramos lleno de cobertura vegetal dentro del agua hizo que nuestra confianza aumentase. Pero nada más lejos de la realidad…


Tuvo que pasar un buen rato y una cantidad considerable de material perdido para una nueva picada. En este caso fue Juanmi quien la consiguió, pudiendo sacar al pez del agua, con un peso aproximado de 300 g.


La cosa no cambió nada, siendo Pepe al cabo de otro período prolongado quien obtuvo otra captura de un pez de similares dimensiones. Los demás, igual: bolos, ni picada…


Juanmi, Alex y yo decidimos comer y reponer fuerzas, mientras los ansiosos de Uge y Pepe prefirieron seguir pescando. ¡¡Craso error!! Después del sabroso bocata, Alex puso al final de la línea lo que sería el “quitabolos” del día, dándole tres peces en menos de 10 minutos. Eran raspas, sí, pero viendo como estaba la cosa, le supieron como tres “treskilos”.


El resto del día fue peor aún si cabe, sin picada para nadie más, salvo para mí, que ya en el descuento, desistí de buscar un diablo verde de buen tamaño y opté por poner el “quitabolos”. Dicho y hecho, al segundo lance observé un pez siguiendo el señuelo, y dos lances después se decidió a comer y conseguí salvar el bolo en un pantano que tiene fama de duro y que nuestra impresión fue que no se aleja de la realidad, además de la tristeza que nos producía la cantidad de basura acumulada por toda la orilla.


Alfonso

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Jornada 30: Embalse de García De Sola y Embalse de San Juan 15-09-2012

Lugar: García De Sola y San Juan

Fecha: 15 de Septiembre del 2012

Miembros: Alejandro, Alex, Juanmi y Pepe (García De Sola), Alfonso y Javi (San Juan)

Descripción (García De Sola):

Trigésima jornada y aparentemente un buen día para la pesca pero que realmente no resultó tan bueno conforme pasaban las horas.

Nos dirigimos a una zona ya conocida en el embalse de García De Sola. Pepe, Alex, Juanmi y yo nos dispusimos para empezar el día montando las cañas y los señuelos, dándonos cuenta nada más empezar que los peces acusaban los pequeños cambios de temperatura de los días anteriores.


Durante un tiempo, ninguno de los cuatro obteníamos picadas hasta que Alex, en una pequeña recula, tuvo la primera, la cual no consiguió materializar. Posteriormente, en esa misma recula fue Juanmi el que, esta vez si, sacó el primer black bass del día cuyo peso fue de 340 g.


Viendo el pez que se le fue a Alex y el que sacó Juanmi nos dimos cuenta del tamaño aproximado que iban a tener los peces durante la jornada, lo cual no nos daba buena espina.

Seguidamente Pepe fue el siguiente en capturar otro ejemplar cuyo peso marcaba 230 g y casi inmediatamente Alex otro de un peso aproximado, 220 g.


Yo, de momento, me mantuve a la expectativa sabiendo que no tardaría mucho tiempo en ocurrirme lo mismo que a ellos, y asi fue, poco tiempo después conseguía mi primera captura del día, con un peso que no llegaba a los 200 g.


Siguiendo nuestra filosofía todos los peces fueron devueltos al agua sin sufrir ningún daño y con la debida oxgenación.


El resto del día transcurrió idénticamente sacando entre todos bastantes peces más del mismo tamaño pero que no nos dejaban satisfechos porque esa no era ni la talla ni el peso que perseguíamos. Pese a esto, se veían gran cantidad de estos por las orillas.


A pesar de que el día fue divertido, y después de un buen paseo, decidimos volvernos con un amargo sabor de boca tras comernos el merecido bocata.

Alejandro

Descripción (San Juan):

Esta vez el propósito era estrenar las dos cañas que me regalaron por mi cumpleaños, ya que la que venía usando se me partió en la última salida... así que decidimos ir con el pato a San Juan, para facilitar el transporte de ambas cañas e ir pescando.

Al inflar el pato, noté que una de las válvulas estaba pasada de rosca y perdía algo de aire, por lo que preferí no arriesgarme. Así que tuvimos que cambiar de planes: tendría que elegir únicamente una caña.
Aún cambiamos más de planes: quise darle un poco a los barbos con el látigo y enseñarle un poco a Javi antes de darle a los basses. El resultado fueron varias picadas con dos barbos y un percasol echados a tierra por mi parte, y desesperación por la de javi. Las fotos las eché yo solo debido a la distancia entre los dos y a la necesidad de devolver los peces rápidamente al agua. Al no poder pesarlos no pudimos materializar estas capturas como récords para este año.


Tras un rato volvimos al coche para cambiar de armas y de enemigos y pateamos en dirección contraria a la habitual para investigar esa zona. Javi sacó unos cuantos basses de medio kilo y multitud de raspas. Yo me tuve que conformar con las citadas raspas.

Al llegar a una zona donde vimos coches cerca del agua, nos preguntamos como habrían llegado hasta allí. Decidimos volver al coche investigando los caminos por los que intuíamos habían entrado esos coches, por lo que ahí se acabo la pesca y las posibilidades de estrenar mi caña con un bass en condiciones.

Después de una buena caminata, llegamos al coche agotados. Serian las 12:30, por lo que nos dio tiempo tomarnos una cañita en un bar cercano antes de volver a casa para comer...
Esperemos que el próximo round sea mas fructífero...

Alfonso

lunes, 10 de septiembre de 2012

Jornada 29: Embalse de San Juan 08-09-2012

Lugar: San Juan

Fecha: 08 de Septiembre del 2012

Miembros: Alex y Pepe

Descripción:

Aquí estamos de nuevo tras un pequeño parón vacacional. En esta ocasión decidimos repetir sitio debido al calor que podría hacernos, con lo cual nos dirigimos al embalse de San Juan.

Fuimos Pepe y yo acompañados de Andrés (hermano de Pepe) quienes nos dispusimos a tentar a nuestros queridos basses.

Nada más llegar las expectativas eran buenas ya que no hacía ni gota de aire y no parecía que fuera a apretar mucho el calor, a pesar de que el embalse había bajado cerca de 10 metros desde la última vez que fuimos y que el agua estaba bastante turbia y llena de algas.

Tras unos cuantos lances a la vez que avanzábamos nos dimos cuenta de que el día no sería tan fructífero como pensábamos ya que no conseguíamos ninguna preciada picada hasta que en una pequeña recula Andrés notó algo. Antes de que volviera a lanzar fue Pepe el que lanzó en ese mismo sitio y nos cercioramos de que lo que Andrés había notado era la picada de un bass puesto que Pepe consiguió sacarlo. El pez en cuestión rondaba los 300 g pero no lo llegamos a pesar puesto que nada más hacerle la foto lo volvimos a soltar.


Esto nos hizo motivarnos algo más, pero solo fueron ilusiones ya que no conseguimos sacar ningún pez más durante prácticamente toda la caminata.

Continuamos nuestro trayecto y en una buena recula plagada de ramas enganché mi señuelo, mal por mí ya que, al intentar desengancharlo, el sedal se partió prácticamente por el empiece del carrete perdiendo todo el hilo que me quedaba. Esto hizo que tuviera que volver al coche (incluida una buena cuesta y un camino de cabras) para coger otra bobina si quería seguir pescando.

Una vez los tres otra vez abajo y tras llegar a la ya típica zona rocosa que nos impedía el paso nos dimos la vuelta y estuvimos tocando de nuevo las zonas que vimos más propensas a tener peces. En una de ellas, en la que en el trayecto de ida yo mismo había avistado un buen ejemplar, volví a lanzar antes de llegar a ella para evitar ser visto. El resultado fue una espectacular picada de un buen pez. Un black bass de 1.060 kg mordió mi señuelo y tras una bonita pelea logré sacarlo fuera del agua. Tras hacerle la preciada foto y darle un beso de agradecimiento el pez fue devuelto al agua para reunirse con sus congéneres.


Esto fue todo lo que pudimos sacar de un día muy difícil a pesar de que las condiciones fueron óptimas. Enfilamos el camino de vuelta ya directos al coche, enfundamos las cañas y nos dirigimos a casa. La semana que viene más y esperemos que mejor.

Alex