lunes, 29 de abril de 2013

Jornada 9: Embalse de San Juan 27-04-2013

Lugar: San Juan

Fecha: 27 de Abril del 2013

Miembros: Alex, Alfonso, Eugenio y Javi

Descripción:


En esta ocasión elegimos un destino cercano ya que los miembros que fuimos de pesca (Alfonso, Javi, Eugenio y yo) teníamos que estar pronto en casa. Decidimos acercarnos al embalse de San Juan, aun sabiendo que era un poco pronto todavía para el bass y que el tiempo no nos iba a acompañar mucho. La zona a la que fuimos era nueva para mí, así que me serviría para conocer algo más de este embalse.

Llegamos a nuestro destino a las 7:45 aproximadamente y lo que nos llamó la atención fueron dos cosas; primero, lo alto que estaba el embalse y segundo, el viento que hacía. Sabíamos que el día iba a ser difícil pero nos pusimos manos a la obra.



Tras acercarnos a la orilla los peces no se dejaban ver, lo cual no era buena señal. Estuvimos lanzando y lanzando pero no teníamos noticias de ellos. Algún barbo podíamos avistar, pero poco más…

Pasada una hora aproximadamente decidimos cambiar de dirección y pescar el lado opuesto a donde dejamos el coche. Allí nuestra caminata fue más dificultosa debido al nivel del embalse y a la cantidad de zarzas que había.

Ya cansados de lo mal que se andaba decidimos darnos la vuelta y en este trayecto fui yo el que vi tras mi señuelo un buen ejemplar de bass que no se decidió a atacar, lo que confirmaba lo apáticos que estaban los peces. Después de esto entre Eugenio y yo logramos ver otro bass que merodeaba por la orilla y tras varios intentos fue Uge el que acertó con el señuelo y logró (por cansino, jejeje) sacarlo del agua para hacernos unas fotos con él y corroborar que había peces. Dio un peso de 870 g.



Esto fue lo último que vimos antes de llegar al coche, recoger las cañas y comernos el bocata. Durante este rato Uge se acercó a la orilla por si avistaba algún pez, y para su asombro así fue, vio un lucio apostado debajo de un árbol y, al minuto después, tres ejemplares de basses de buen tamaño, lo que hizo que volviéramos a montar los artilugios e intentáramos quitarnos el bolo en el último momento.
Solo Eugenio consiguió clavar otro bass de aproximadamente 300 g, que tras la foto fue devuelto al agua.



Después de esto ya decidimos, ahora sí, poner fin a una jornada corta y un poco decepcionante, en la que lo único a destacar era la limpieza del embalse y la belleza de la zona.




Alex

viernes, 19 de abril de 2013

Jornada 8: Embalse de Cijara 18-04-2013

Lugar: Cijara

Fecha: 18 de Abril del 2013

Miembros: Alejandro, Alex, Eugenio y Javi

Descripción:

Otra semana más volvimos a salir en busca de los deseados basses y en esta ocasión seríamos Alejandro, Alex, Javi y mi menda lerenda ya que al ser un día entre semana los demás miembros del club no nos pudieron acompañar.

Empezaríamos como siempre la jornada con la parada obligada para tomar coffee y tripear, también en este caso para comprar algunos peces porque Alejandro quería probar suerte y tantear los lukis con el arte del pez vivo pues en otras ocasiones se le dio bastante bien este lugar.

Llegamos al punto elegido para empezar la deseada pescata. El clima parecía que nos iba a ser favorable y el agua, aunque algo turbia, nos invitaba a tener buenas sensaciones.



Comenzamos y al segundo lance... Zas!, Alex tuvo una tímida picada que no tuvo la suerte de clavar. Justo después de esto, tras unos cuantos minutos, escuchábamos como Alejandro chapoteaba y peleaba con un lucio, jajaja. Sin pensarlo salimos corriendo hacia él y efectivamente acababa de abrir el bote, un bonito lucio de 3.400 kg.



Después de su pesaje y su medición fue devuelto sano a su hábitat, como es costumbre por nuestra parte.
Ahora si, emprendimos nuestra caminata habitual y fue Javi el primero en hacer la captura de un bass… y otro y otro, los cuales oscilaban entre los 300 g y 500 g.



Mientras Alex y mi menda seguíamos teniendo algunas picadas pero sin suerte, Javi seguía con su “peculiar” forma de pescar y sacando peces, esta vez algo más pesados…



Hasta que decidimos cambiar de señuelo y… Zas! mi primer bass de 540 g, y así sucesivamente continué sacando peces, la mayoría pasando del kilo, mientras Alex no se comía un colín, jajaja.



Pero ya por cansino y gracias a mi intuición le pegó en el bebe a su primer bass y cambió el gesto de su cara.



Entrado el medio día decidimos ir a tomar un refrigerio para luego con fuerzas nuevas volver a probar suerte.
Llegando a la altura de Alejandro, Alex se dio cuenta que con algunos gestos nos llamaba para avisarnos de una nueva captura (que oportuno y que suerte la suya), otra lucia, esta vez una hermosa pepa de 6.150 kg.



Pasada una media hora comenzamos nuestra segunda manga particular consiguiendo alguna que otra captura más siendo el resultado total de 10 peces para Javi, 4 para Alex y 11 para mí, que conseguí la mayor captura del día y consiguiente récord momentáneo del año con un bass de 2.030 kg.



En este tramo sucedió la anécdota más graciosa del día cuando Alex tuvo un enganche y, al no poder sacarlo el mismo, acudí en su ayuda. Tras varios intentos logré desengancharlo, justo cuando en ese momento un bass lo atacó, liberándose finalmente el mismo del anzuelo. Las risas entre nosotros no pararon hasta pasado un buen rato.
Ya llegando al coche nos esperaba Alejandro con otra captura más peque, un luciete de 920 g.



El día en general no estuvo nada mal y en esta ocasión nos fuimos todos más contentos y nuestras mochilas, para variar, más ligeras.

Eugenio

martes, 16 de abril de 2013

Jornada 7: Embalse de García De Sola y Embalse de San Rafael De Navallana 13-04-2013

Lugar: García De Sola y San Rafael De Navallana

Fecha: 13 de Abril del 2013

Miembros: Alejandro, Alex, Eugenio, Javi y Pepe (García De Sola), Juanmi (San Rafael De Navallana)

Descripción (García De Sola):


Después de tanto tiempo sin ir de pesca, decidí aprovechar el buen tiempo para hacer una escapada, junto con mis compañeros y amigos del club.

El lugar que decidimos fue el embalse extremeño de García De Sola que semanas antes había hecho perder muchos señuelos debido al alto nivel de agua, además de la desilusión por el estado pésimo de la misma.

Prometía un día soleado, sin aire y así fue, un día fantástico, aunque el nivel de agua era muy alto, pero al menos estaba más clarita. Pepe y Uge decidieron prescindir del vadeador ya que con la temperatura elevada no querían correr el riesgo de que se les recocieran los testículos.



La jornada empezó mal para todos los miembros del grupo, menos para Alejandro que nos demostró su experiencia en dicho embalse sacándonos tres ejemplares de black bass seguidos, aunque finalmente acabaría con cinco piezas, siendo una de ellas el récord de este año, por el momento, con 1,940 kg.




Mientras, los demás no habíamos tenido ninguna picada. Seguidamente la cosa empezó a cambiar a mi favor, algunos lo definieron como suerte, otros solo asentían con la cabeza y es que a pesar de mi forma extraña de pescar, diferente pero efectiva, que algún día patentaré, conseguí clavar unos cuantos basses de un buen tamaño, gran parte pasando del kilogramo, incluso uno de ellos rozando el peso de Alejandro con 1.900 kg.



Mientras los demás aún seguían sin capturar nada, Uge se puso las pilas e inauguró su jornada con varios basses, mientras Alex y Pepe no tenían la misma suerte.



Alex estaba cada vez más desanimado y desilusionado por la poca suerte que estaba teniendo hasta que sonó la campana e inauguró la jornada con un ejemplar de 1.270 kg.



Ya solo faltaba Pepe, que aun teniendo picadas no conseguía sacarlos del agua. Nos fuimos de camino al coche y antes de finalizar la jornada clavó un buen ejemplar de 1.040 kg quitándose la mala suerte que le persiguió durante todo el día.



En general, el día estuvo muy bien en cuanto a pesca y tiempo se refiere y todos acabamos bastante contentos ya que, aunque algunos más que otros, todos conseguimos sacar algún pez.

Javi

Descripción (San Rafael De Navallana):

De nuevo ponía rumbo al embalse de San Rafael De Navallana. Esta vez tenía bastantes más esperanzas, ya que el buen tiempo reinante durante toda la semana me hacía pensar que los peces iban a estar más activos.

Esta vez madrugué un poco más, y a las 8:30 aproximadamente ya me encontraba pescando. Cuando llegué ya había bastantes coches, lo que indicaba que iba a ser un día de pesca bastante concurrido de gente.



En uno de mis primeros lances, noté la primera picada del día. Tras una pelea digna con el ejemplar que había al otro lado, logré sacarlo a la orilla. Un bonito black bass de 1.100 kg de peso. Sin duda el día empezaba muy bien.




Sin embargo, para mi sorpresa, en la siguiente media hora todavía iba a mejorar más, ya que en este transcurso de tiempo otros dos ejemplares fueron capturados. Éstos tenían menos peso, de 540 g y 650 g respectivamente.




A partir de este momento, noté una clara disminución de la actividad de los peces, ya que no tuve más noticias de ellos hasta pasadas unas horas, cuando nuevamente volví a notar respuesta al otro lado del sedal. Esta vez se trataba de un pez de menor tamaño que dio un peso en báscula de 350 g.




Después de esta última captura, proseguí orilla adelante intentando conseguir alguna que otra más. El calor estaba apretando, teniendo que resguardándome a lo largo del día en varias encinas para tomar un merecido descanso. La caminata continuaba, y tras un lance a una zona de árboles sumergidos, un nuevo pez hizo acto de presencia. Éste ofrecía una mayor resistencia que el anterior, pero sin embargo no me parecía un ejemplar “trofeo”. Cuando conseguí sacarlo del agua fue pesado, dando un peso de 770 g, y rápidamente fue devuelto al agua tras su correspondiente oxigenación.



Tras esa bonita pelea, decidí volver de camino al coche, ya que el calor estaba empezando a ser mi peor enemigo. Una vez en el coche, pude comprobar la cantidad ingente de vehículos que había en la zona. La mayoría pertenecía a familias que habían ido a pasar el día pescando en el campo (principalmente centrados en la pesca de carpas). Mi esperanza es que toda esta gente se encargase de recoger todos los desperdicios que produjo, ya que los restos de latas de maíz y de bebida, así como numerosos residuos plásticos desmejoraban el buen estado de conservación del embalse.




En resumen, fue un día muy provechoso en cuanto a capturas se refiere, si bien las grandes “abuelas” del pantano no se dejaron ver. A medida que el calor fue apretando, los basses se fueron para los fondos donde las aguas estaban más frías, mientras que los que se encargaron de habitar las zonas más superficiales fueron los numerosos bandos de alburnos que animaban a los niños que se divertían observándolos.

Juanmi